02/07/2020 13:01:14
Las recientes e intensas precipitaciones dejaron un saldo de numerosas inundaciones, desbordes, daños en infraestructura de canales, etc. Esta situación reavivó un debate histórico acerca de la supuesta responsabilidad que tienen los canales de riego en el control del agua lluvia. Revisemos algunos antecedentes.
Diseño de los canales
Los canales de riego son cauces artificiales para conducir el agua de riego, captada en la fuente (en este caso Río Maule) hasta los predios de los agricultores. En su inicio tienen una capacidad de conducción de agua, y en su camino van entregando parte del caudal que captaron en el río desde el primer al último agricultor. Esto implica, que son cauces “telescópicos”, que en su inicio tienen una capacidad que se va reduciendo conforme avanzan, quedando reducidos a pequeñas acequias en los tramos finales.
En este sentido, los canales de riego son exactamente lo contrario a lo que se requiere para sanear el agua lluvia. En dicho caso, se requiere un cauce que aumente su capacidad hacia aguas abajo, ya que conforme el cauce avanza, va recibiendo nuevos y mayores aportes. Como analogía, pensemos en un río, que es un cauce natural de drenaje de aguas lluvia que tiene un pequeño tamaño en su nacimiento y un gran tamaño en su desembocadura.